Molly’s Game está basada en la historia real de Molly Bloom (Jessica Chastain), una prometedora esquiadora de nivel olímpico que, al ver truncada su carrera deportiva, acabó organizando las partidas de póker clandestinas más exclusivas de Estados Unidos. A sus partidas acudían las más grandes estrellas de Hollywood, deportistas de élite, titanes del mundo de los negocios y, finalmente, miembros de la mafia rusa, hasta que Molly fue arrestada por 17 agentes armados del FBI en mitad de la noche. Inmersa en una batalla judicial, su único aliado en su lucha ante los tribunales fue el abogado criminalista Charlie Jaffey (Idris Elba), quien supo ver en ella una verdad mucho más sincera de la que la prensa sensacionalista publicó en sus páginas.